lunes, 5 de enero de 2009

Nuevo encuentro diurético

Queridos niños y niñas: vista la afición por la urología que se detecta últimamente entre el exborsismo, la que postea os cuenta que si hay algún encuentro que pueda asemejarse de verdad a un Manneken Pis intenso, ese ha sido el Capodanno fiorentino con Diane y Jean Paul (como los llamó François el otro día), y con otros participantes estupendos como Bárbara (pero Bárbara de Mallorca, no Fluxá), Stefanie, Dominique y una segunda Diane, esta vez italobelga.

La que postea esto llegó el mismo día 31 a Florencia, tras pasar unos minutillos en Fiumicino haciendo escala y derramando unas lagrimicas de nostalgia. De casa de JP y Diana, en el barrio de San Frediano, nos fuimos a una colinita florentina, cerca de San Miniato, donde nos esperaba una casa-casa, con su chimenea en el salón y todo. Allí, la anfitriona Stefanie tenía todo previsto para empezar a asar carne de maiale, patatas, radicchio etc etc. Nosotros aportamos el toque ibérico: polvorones, jamón y un panettone fashion procedente de una pastelería clásica del mismo Milán.


Como no se oían campanadas por ningún lado tuvimos que generarlas nosotros mismos para comernos las uvas. Huelga decir que los comensales de otros países de la UE mostraban una absoluta falta de respeto hacia tan arraigada tradición. En fin.

Al día siguiente comimos lenticchie con cotechino, como era menester, y salimos a pasear por Firenze. Hicimos hermosos planes que incluyeron, cómo no, probar ricas especialidades regionales como el cuello de gallo relleno (no es broma, amigos), y bueno, lo que es pasear por calles finas, ir a la Antica Erboristeria de Santa Maria Novella y cosas así:







Los anfitriones nos trataron excelentemente, nos hicieron sentir mejor que en casa y se han ganado el primer puesto ex-aqueo con Josito de Burgos en el tema anfitrionazgo

¡¡Qué gran Capodanno, amigos!! Feliz año a todos.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Nosotros también lo pasamos pipa. ¡Con estas invitadas da gusto anfitrionar! Esperemos que os entren ganas de venir a todos. Buon anno a tutti!

Anónimo dijo...

No, si ganas ya teníamos, pero ahora ya nos morimos de la envidia... menos mal que siempre me quedará Burgos y la ilusión de conocer un día la casita de mi pequeño Fer!!!

Anónimo dijo...

Ripley, la casa de il tuo piccolo Fer es monérrima e ikéika: todo limpito y curioso. Ven a verla y de paso hacemos otras actividades, majetona.

Anónimo dijo...

Bien cierto todo, amigos. Las ganas florentinas y el monerrismo de Casa Fer. Afirmo.

Ah y también la adaptación francesa de los anfitriones. Hostal Delicias hace honor a su nombre y crea soplos de inspiración!